Es un whisky de malta de la región de las Highlands
escocesas famoso por ser un un-peated malt (Durante el proceso de secado de la
malta, no se utiliza turba), algo poco común en la región de las tierras altas.
Las barricas de jerez seleccionadas a mano ayudan a crear un
paraíso de sabores y color dorado, un equilibrio perfecto entre roble y
dulzura.
Ralladura de limón, manzanas acarameladas y aroma a
coco. Las barricas de jerez seleccionadas a mano ayudan a crear este
paraíso de sabores y un rico color dorado. Es el sabor de la destilación
más lenta de Escocia y nuestra insistencia en la cebada secada al aire, nunca
con turba.
Graduación: 43% Vol.
NOTAS DE CATA:
Vista: De color dorado.
Nariz: Aceite de
coco, miel, ralladura de limón, roble seco.
Paladar: Ralladura
de limón, coco, especias de canela, jengibre, galletas de mantequilla, manzanas
acarameladas, toque de jerez, jengibre y vainilla.
Final: Un toque
de jerez y roble suave. Muy bien equilibrado
Desde 1833, fecha de fundación de Glengoyne, la destilería
ha estado elaborando whisky de malta sin descanso, sin períodos de inactividad.
La destilería está situada al norte de Glasgow y al sur de la región escocesa
de las Highlands, tanto es así, que el whisky se destila en las Highlands y
envejece en las Lowlands.
En 1984, los hermanos Lang se convirtieron en proveedores de
su Majestad Reina Elizabeth, obteniendo el sello real, que ha sido implementado
en todos los productos de Glengoyne desde entonces.
El whisky que produce Glengoyne es de carácter suave y
ligero, en el que suelen destacar las notas de malta, clavo, manzana verde y
toffee.